(Madrid)
Desde el 10 de junio hasta el 25 de julio se podrá ver la muestra "Sobre el contrato natural" en la Galería de Arte Inés Barrenechea (Madrid).
La amenaza que supone el cambio climático ha calado de forma global en la percepción que hasta ahora se tenía del medio natural, obligando a las sociedades contemporáneas a modificar las políticas, contrapuestas, de explotación de recursos por una parte y de protección -sobreprotección- de determinados entornos naturales por otra. Este modelo, obsoleto, va dejando lugar a nuevas formas de gestión basadas en la convivencia cotidiana, donde las fronteras entre orgánico y tecnológico, medioambiental y urbano ó progreso y conservación se difuminan, construyendo nuevos paisajes, híbridos, donde convergen naturaleza y artificio.
La creciente preocupación por la sostenibilidad y por aplicar unos programas de gestión más integrados también ha generado conflictos y contradicciones que, nuevamente, se ponen de manifiesto en la construcción del paisaje contemporáneo, especialmente los derivados de la creciente confusión entre los términos medio ambiente y paisaje.
La propuesta toma como punto de partida el ensayo El Contrato Natural, escrito por M. Serres en 1990, en el que plantea la necesidad de establecer un acuerdo entre el ser humano y la naturaleza, paralelo al contrato social, con el que definir una serie de normas morales y de leyes que permitan regular las relaciones entre ambos.
Para profundizar en este análisis el proyecto se estructura en forma de diálogo, donde el espectador se enfrenta con cuatro obras que tratan la representación del paisaje y un conjunto de textos seleccionados. De esta forma la propuesta pretende investigar cuestiones como la transformación del territorio, la importancia del medio ambiente, la relación entre tecnología y naturaleza ó la "verdolatría" en la construcción del paisaje, no sólo a escala territorial sino también urbana.
Tomando como referencia las nuevas tendencias en arquitectura y paisajismo, la propuesta obvia la frontera entre territorial y urbano e indaga la presencia natural en la ciudad, marcada por la inversión de poderes entre el ser humano y la naturaleza, donde esta última debe adaptarse a las condiciones ambientales y climáticas impuestas.
Se proponen múltiples lecturas cruzadas entre las cuatro obras que pasan de una escala territorial a un contexto urbano y de una actitud comprometida a la desidia y el abandono. Las fotografías de las series En el camino y E.N.P.1, dialogan sobre la transformación del territorio en paisaje y sobre los diferentes procesos de antropización del mismo que se sitúan entre la desolación y la sobre-protección. En una escala urbana, las series Sitescape y Paisajes mínimos analizan la presencia natural dentro de la ciudad, desde los espacios residuales reivindicados como reservas naturales hasta los ecosistemas altamente tecnificados que se incorporan dentro de los proyectos de arquitectura contemporánea. Al margen de la escala, En el camino y Sitescape desarrollan las teorías del paisajista francés G. Clément, estudiando el erial, el no-lugar y demás espacios residuales como reservas de gran riqueza natural y pasiajística basados en la espontaneidad y en el azar. Por su parte, las fotografías pertenecientes a las series Paisajes mínimos y E.N.P.1 pretenden poner de manifiesto las contradicciones generadas por una política basada en la sobreprotección y el marketing medioambiental.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comente esta nota- los comentarios anónimos no se publican